En 1994 llega a la Fundación Populorum Progressio el proyecto 0029 Ecuador con el objetivo de crear un espacio comunicativo en la zona de los cantones de Santa Isabel y Pucará, cuya población es campesina de bajos recursos, dedicados a las labores como jornaleros o aparceros, mineros de forma rudimentaria, ganadería en pequeñas cantidades de animales para uso doméstico y explotación de la caña de azúcar.
En estos cantones, la mayoría de sus habitantes viven de manera aislada y la única relación o contacto que se establece entre ellas, es a través de la cabecera cantonal en los días de mercado, girando económicamente en torno al núcleo urbano que representan. Esto provoca una concentración de poder e influencia en las cabeceras cantonales y una situación de marginación y aislamiento de las comunidades.
“Nuestro principal objetivo era iniciar un proceso de concientización entre la población de estos cantones a partir de talleres de comunicación, durante los cuales se hablaba de la importancia de un medio de expresión para el pueblo y la búsqueda de posibles promotores para colaborar con la puesta en marcha de la emisora”, comentaba Francisco Aperador, quien en ese entonces se desempañaba como Director de la Fundación Chaguarurco.
El proyecto consistió en la instalación y dotación de dos centros de transmisión uno en Santa Isabel y otro en Pucará. La Fundación Populorum Progressio, apoyó la iniciativa con un aporte de US $10.000, dinero que fue invertido en la compra de 2 equipos de enlace (2 transmisores y 2 receptores), 4 antenas, cables, conectores, 1 consola de radio y 3 micrófonos. Así mismo contó con la colaboración de los técnicos de CORAPE (Coordinadora de Radios Populares del Ecuador) y ALER (Asociación Latinoamericana de Escuelas Radiofónicas), quienes asesoraron el proyecto y la implementación del mismo. “Los enlaces fueron comprados en Estados Unidos, a través de Radio Católica Nacional y la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, que desinteresadamente prestaron su capacidad de gestión para la transacción. El sistema de enlace llegó junto con el trasmisor nuevo que permitió aumentar el área de cobertura de la radio. Este transmisor fue financiado con ayuda de otras organizaciones”, afirmó Francisco Aperador, responsable.
De esta manera nace ‘Radio Chaguarurco’, con la finalidad de ser un espacio popular/participativo para la formación humana y técnica de los campesinos, emitiendo programas de formación agrícola, ganadera y de recuperación de las tradiciones de la zona, haciendo que se valore la cultura e identidad. “Las canciones que prácticamente habían desaparecido y que solo cantaban los más mayores en las reuniones familiares, de nuevo se escuchan por la radio. En cada comunidad hay varias personas que cantan e incluso que componen y todos están pasando por la radio. Son de los programas de más audiencia y están haciendo que se recupere el orgullo por la cultura”.
Para su desarrollo, fue muy importante la participación de la comunidad mediante la creación de una red de reporteros populares encargados de acercar la radio a cada comunidad, siendo los portavoces de la misma. En 1995 ya había 50 reporteros populares de las comunidades campesinas haciendo programas, “superando las expectativas que se tenían”.
Actualmente, “es una radio comunitaria que fomenta los valores culturales, artísticos y lingüísticos, acompañando los procesos organizacionales de los diversos grupos y movimientos sociales con el fin de ofrecer espacios de capacitación y producción de insumos radiales que coadyuven a la construcción de una sociedad justa y equitativa al servicio de la comunidad Azuaya”.
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